Zángana nace con el objetivo de producir hidromiel de forma artesanal en el entorno privilegiado que supone el Principado de Asturias. En Zángana buscan satisfacer al cliente en base a los siguientes principios:

  • Innovación en tres direcciones: productos finales, con el objetivo de adaptarlos a los intereses de los consumidores; los métodos de fabricación,  más sostenibles y eficientes; y el trato con el cliente.
  • Calidad. Para Zángana, los máximos estándares de calidad de un producto se alcanzan cuando se combina un profundo conocimiento de los métodos de fabricación, una cuidada selección de las materias primas y un alto grado de control y conocimiento de los procesos. 
  • Artesanía. La producción como un tema personal, dedicándole todo el cariño, cuidado e interés posibles. De esta forma huyen de la fabricación a escala industrial, prefiriendo trabajar con pequeños lotes, métodos artesanos y materias primas naturales.
  • Producción local. Utilizando siempre que sea posible materias primas de la tierra. Fabricando la totalidad de sus productos en su fábrica en Santo Adriano (Asturias)
  • Medio ambiente. Diseño y fabricación de productos controlando al máximo sus impactos ambientales, teniendo en cuenta para ello todo el ciclo de vida.
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